Diseño de infraestructura

De una idea a la construcción

 

El diseño de infraestructura es un proceso evolutivo y se puede decir que pasa por lo menos por tres etapas básicas: el diseño conceptual, el diseño preliminar y la ingeniería a detalle o proyecto ejecutivo. Este proceso es generalmente el mismo para todos los proyectos de infraestructura, pero especialmente para proyectos de transporte es el proceso que se sigue porque el mismo va directamente ligado a los procesos que hay que seguir para obtener su presupuesto. Mezclando ambos temas, un proyecto pasa normalmente por las siguientes etapas:

 

1.       Concepción de la idea y diseño conceptual

2.       Elaboración de estudios de prefactibilidad, empezando por el estudio de demanda

3.       Diseño preliminar

4.       Elaboración del Análisis Costo Beneficio

5.       Registro en la Unidad de Inversiones de la SHCP

6.       Elaboración del Proyecto Ejecutivo

7.       Construcción

 

Un diseño conceptual de infraestructura es un diseño básico, por eso se le llama también ingeniería básica, ya que permite de alguna manera visualizar la idea que se tiene al respecto. Su nivel de detalle es el suficiente para evaluar aproximadamente su costo, funcionalidad y entender los matices y problemas que el proyecto puede tener.

 

Es importante saber que generalmente las primeras seis etapas son desarrolladas por una firma de ingeniería independiente, como Key Capital, y no por una compañía constructora o un consorcio que participará en la construcción. La razón es evitar conflictos de interés que inflen los costos del proyecto, como lo puede ser un sobredimensionamiento de la infraestructura para elevar la facturación, o inclusive desarrollar una infraestructura que no se justifica por los estudios de demanda.

 

El estudio de demanda es fundamental para el diseño preliminar o anteproyecto. En proyectos de infraestructura de transporte estos estudios ayudan principalmente a tres cosas:

 

1)      Determinar si el proyecto es necesario y cuantificar su beneficio social

2)      Saber cuánto estarían dispuestos a pagar los usuarios por el nuevo servicio

3)      Dimensionar el proyecto, por ejemplo, saber cuántas estaciones, de qué tamaño y dónde ponerlas

4)      Estimar sus costos y ponderar así el costo-beneficio

 

Los estudios de demanda pueden incluir:

 

1.       Un inventario de la infraestructura y los servicios existentes, como rutas de transporte, vías sin peaje, otros medios de transporte, etc.

2.       Integración de otros estudios e información estadística como hogares, población, negocios, estudios previos, etc.

3.       Conteos y aforos de vehículos, usuarios, peatones, etc.

4.       Análisis de tiempos de recorrido, velocidad, ascensos y descensos, horas de máxima demanda y día, etc. 

5.       Encuestas, como las de origen-destino, preferencia modal, tiempos de recorrido, bases de taxis, en transporte público, etc.

 

Toda esta información se integra en software especializado como Visum, Visim o Viswalk que permiten hacer simulaciones, modelos y escenarios para entender la situación prevaleciente y cómo mejoraría con el proyecto.

 

El análisis profundo de esta información permitirá determinar cuestiones como la dimensión de la infraestructura, la cantidad de vehículos o material rodante necesarios, las frecuencias de operación, los horarios, poder así hacer un diseño preliminar de la infraestructura y elaborar su ingeniería básica o anteproyecto.

 

Por la información recopilada, desarrollada y analizada, el anteproyecto puede tener ahora un nivel adicional de detalle, para convertir con estudios complementarios un proyecto conceptual en un anteproyecto, para llegar a mayores niveles de precisión y a una cuantificación de la inversión necesaria.

 

Los dos insumos previos, los estudios de demanda y el anteproyecto, permitirán ahora hacer el análisis costo beneficio y determinar así la factibilidad del proyecto de inversión. Siguiendo una metodología rigurosa de análisis la idea es determinar si los beneficios sociales serían mayores a los costos ligados a la inversión propuesta y en su caso priorizar o comparar con otros proyectos posibles. La integración de un estudio de Análisis Costo Beneficio es lo que permitiría registrar el proyecto en la Unidad de Inversiones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

 

El registro en la Unidad de Inversiones de la SHCP permite que el proyecto sea susceptible de recibir presupuesto, lo que permitiría desarrollar la siguiente etapa, el proyecto ejecutivo. También conocido como ingeniería a detalle, el proyecto ejecutivo es el diseño del proyecto a un nivel de detalle para establecer todos los dibujos finales de la construcción, las especificaciones del proyecto, la documentación (como las condiciones del contrato, bases y términos de referencia), los volúmenes necesarios para la obra, un catálogo de conceptos completo y su respectiva estimación de costos. El proyecto ejecutivo también debe prever de dónde provendrán los insumos, el proceso constructivo, y los riesgos, contingencias o circunstancias que se deberían de prever en la construcción.

 

Diseño Conceptual


Idea o concepto

Ingeniería Básica


Anteproyecto y estudios de demanda

Costo Beneficio


Prefactibilidades

Proyecto Ejecutivo


Ingeniería a detalle

Key Capital - Infraestructura